El macabro arte de cubrir los libros con piel humana, una
práctica conocida como bibliopegia antropodérmica y que era de particular interés
en el siglo XIX, aunque se cree que se hacía desde mucho antes. Tan inusual, que hoy en día quedan muy pocos libros
así en el mundo, pero tan espeluznante, que tan sólo imaginar tenerlos en las
manos, producen un extraño escalofrío que recorre todo el cuerpo.
Un macabro hallazgo fue descubierto en la Universidad de Harvard,
cuyos empleados piensan que las portadas del libro, "Des Destinees de
l’Ame" (Los destinos del alma), fueron hechas con la piel del cuerpo no
reclamado de una paciente mental que murió de causas naturales. Se dice que el
escritor, Arsene Houssaye, le dio la obra a mediados de la década de 1880 a su
amigo el doctor Ludovic Bouland, quien aparentemente lo encuadernó.
Uno de los pocos ejemplares que sobreviven se localiza en
Reino Unido, el libro está hecho de la piel del primer hombre que colgaron en
la prisión de Bristol, y se encuentra en poder de la oficina de registros de
esa ciudad. Su cubierta revestida de color marrón oscuro fue hecha con la piel
de John Horwood quien a los 18 años fue colgado por el asesinato de Eliza
Balsum.
El libro contiene los detalles del crimen que fue cometido
en 1821, en el que Horwood, quien ya había amenazado con matar a Eliza, pues se
había obsesionado con ella, la atacó con una piedra mientras ella se dirigía a
un pozo a sacar algo de agua. Según detalla el libro, Horwood cogió una enorme
piedra y con la más sangrienta brutalidad, golpeó a Balsum en la cabeza, hasta
casi destrozarle el cráneo. Los gritos de la chica fueron escuchados por sus
amigos, quienes la encontraron ensangrentada y la llevaron al hospital, donde
murió debido a la gravedad de las heridas que le provocó la piedra en la
cabeza.
Tras su juicio y ejecución, el cuerpo de Horwood fue diseccionado
por el médico cirujano Richard Smith, durante una lección pública en el
Hospital Real de Bristol. Fue entonces cuando Smith decidió que algunas partes
de la piel de Horwood fuera curtida para encuadernar la recopilación de
documentos sobre su caso. La portada del libro fue revestida con una calavera y
huesos cruzados y, escritas en letras doradas, las palabras "Cutis Vera
Johannis Horwood", que significa "la piel verdadera de John
Horwood".
Décadas más tarde, El esqueleto de Horwood fue
descubierto, por Mary Halliwell, una familiar lejana, colgando en un armario, y
fue ella misma quien organizó el funeral para quien fue el hermano del papá de
su tatarabuelo. La ceremonia tuvo lugar 190 años más tarde, exactamente a la
misma hora en la que Horwood murió en la horca.
El libro, actualmente se encuentra exhibido en el museo M. Shed de Bristol, se trata de una de las piezas más populares en el museo y se encuentra bajo los mismos procesos de conservación del resto de los libros encuadernados en piel y dentro de las mismas condiciones atmosféricas. La archivista Allie Dillon, declara lo siguiente a la BBC: "Me parece una historia realmente triste, John Horwood parece haber sido una persona muy vulnerable y eso puede haber contribuido a sus acciones. Es muy macabro cubrir un libro con la piel de un ser humano y es difícil entender por qué lo hicieron. Me parece muy vengativo".
Otro libro, hecho con la piel de un notable asesino,
William Burke, esconde una siniestra historia entre sus páginas. William Burke
y su socio, William Hare, vendían cadáveres para ser diseccionados en la
escuela privada de Anatomía de Edimburgo, quien entonces era dirigida por
Robert Knox, pero, en lugar de desenterrarlos, se dedicaron a matar gente para
tales fines. 15 fueron los cuerpos de gente que ellos mismos asesinaban, los
que consiguieron vender, antes de ser descubiertos.
Se trata de un pequeño libro de bolsillo, que no tiene
páginas pero que era usado para guardar notas personales y dinero, y cuya
cubierta está estampada con la fecha de ejecución de Burke en 1829. El libro se
encuentra en el museo del Colegio Real de Cirujanos de Edimburgo, y la forma en
la que llegó a ser encuadernado con pedazos de la piel de Burke, es un
misterio.
"Hubo una disección pública y se reportó que parte
de la piel se perdió. Poco después apareció el libro a la venta en Edimburgo. La
producción de este libro se da cuando estaba de moda tener partes de criminales
ejecutados pues eran consideradas como talismanes" narró Emma Black a la
BBC.
Entre los criminales cuya piel se usó para hacer libros
se encuentra el asesino de Devon,
Inglaterra, George Cudmore, quien fue llevado a la horca por envenenar a su
esposa, y William Corder, condenado en Suffolk en 1827, por matar a Maria Marten, en un crimen
conocido como "El asesinato del granero rojo", una historia que sigue
inspirando canciones y obras dramáticas.
Según Simon Chaplin, director de la Biblioteca Wellcome,
que
guarda tomos sobre la historia de la medicina, el interés por encuadernar
libros en piel llegó a su apogeo en el siglo XIX. La biblioteca tiene un texto
del siglo XIV sobre la virginidad que fue reencuadernado en el siglo XIX con
piel humana.
"No hay una cantidad enorme de estos libros pues ha sido una práctica ocasional hecha principalmente para despertar una emoción indirecta más que por un motivo práctico. Quizás haya otros libros que se cree que están encuadernados con piel pero no es así, y otros que están cubiertos con piel humana pero no se sabe", señala Simon Chaplin.
Espeluznante, sin duda alguna.
Sigma Investigación Paranormal
Fuente: http://www.bbc.com/mundo/noticias/2014/07/140701_libros_piel_humana_finde_dv